Sencillo, profundo, te deja con ganas de repetir
Nilo nos ha sorprendido por su sencillez y al mismo tiempo por su profundidad. Debería existir una categoría de juegos que englobase todos aquellos con los que la primera partida la juegas sin saber muy bien lo que está pasando y, en cuanto haces el recuento de puntos final, se te ilumina una bombilla y empiezas a pensar en todas las cosas que quieres intentar tener en cuenta en la siguiente (que casi seguro realizarás a continuación, a menos que tengas planes urgentes). ¿”Juegos Reveladores”? Suena bien, pero tenemos nuestras dudas acerca de posibles licencias que estemos usando sin saberlo…
Nilo te gustará si:
- Te gustan los juegos fáciles de aprender, pero difíciles de dominar.
- Te gustan los juegos que se enseñan en lo que te preparas una taza de café.
- Te gustan los juegos con rejugabilidad alta y duración justa para pedir una revancha.
- Te gustan los juegos de mesa, sin más.
Nilo no te gustará si:
- Sólo juegas en trenes o aviones, dado que requiere de una mesa mediana (que no larga).
- Tienes pánico al agua.